Es un tratamiento para hidratar y relajar la región de los pies.
Los pies no tienen muchas glándulas y, por lo tanto, no se hidratan. Por eso es muy importante disponer regularmente de un spa de pies con hidratación profunda para obtener este beneficio. Se realiza una secuencia de masajes para relajar las tensiones cotidianas y aliviar la fatiga del pie con un tratamiento de hidratación profunda. Primero, se realiza un baño de pies con hojas aromáticas, sal gruesa y agua tibia para aflojar y relajar la musculatura de los pies, seguido de un masaje con una crema exfoliante para eliminar las células muertas y favorecer la renovación celular. Poco después, se aplica la mascarilla de parafina, envolviéndola en botas térmicas para mantener el calor y hacer que penetre el producto. Finalmente, se da un masaje relajante.
